«Esa noche Beli navegó
en un gran océano de soledad, zarandeada por chubascos de desesperación, y una
de las veces que se quedó dormida, soñó que había muerto de verdad y para
siempre y que ella y su hijo compartían un ataúd. Cuando al fin despertó, ya
era noche y, afuera, en la calle se desplegaba un grado de pena como nunca
antes había conocido, una cacofonía de lamentos que parecía haber sido
arrancada del alma resquebrajada de la propia humanidad. Como una canción
fúnebre para el planeta entero.
Mamá, jadeó, mamá.
¡Mamá!
Tranquilízate,
muchacha.
Mamá, ¿eso es por mí?
¿Me estoy muriendo? Dime, mamá.
Ay, hija, no seas
ridícula. La Inca puso las manos, como guiones torpes, alrededor de la
muchacha. Bajó la boca a su oído: Es Trujillo.
Lo mataron a balazos,
susurró, la misma noche que habían secuestrado a Beli.
Nadie sabe nada
todavía. Salvo que está muerto.»
Junot Díaz
La maravillosa vida breve de Óscar Wao
La maravillosa vida breve de Óscar Wao
1 comentario:
Queremos más fragmentos!!!✊😉
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