“—No puedo hablar bien —me explicó Naoko—. Últimamente me pasa mucho. De verdad que no puedo hablar bien. Cuando intento decir algo, sólo se me ocurren palabras que no vienen a cuento. Que no vienen a cuento o que expresan todo lo contrario de lo que quiero decir. Y, si intento corregirlo, me lío más aún, y más equivocadas son las palabras. Y al final acabo por no saber qué quería decir al principio. Es como si tuviese el cuerpo dividido por la mitad y las dos partes estuviesen jugando a perseguirse. La sensación es ésa. En medio hay una columna muy gruesa, ¿sabes?, y las dos partes van dando vueltas a su alrededor jugando a perseguirse. Una parte de mí tiene la palabra adecuada, pero la otra parte nunca puede atraparla de ninguna de las maneras.”
Haruki Murakami
Sauce ciego, mujer dormida
7 de junio de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Vistas de página en total
Con la tecnología de Blogger.
No hay comentarios:
Publicar un comentario