«Querían hablar, pero no pudieron
pronunciar una sola palabra. Las lágrimas brillaban en sus ojos. Los dos
estaban delgados y pálidos, pero en aquellos rostros ajados brillaba el alba de
una nueva vida, la aurora de una resurrección. El amor los resucitaba. El
corazón de cada uno de ellos era un manantial de vida inagotable para el otro.
Decidieron esperar con paciencia. Tenían que pasar siete años en Siberia. ¡Qué
crueles sufrimientos, y también qué profunda felicidad, llenaría aquellos siete
años! Raskolnikov estaba
regenerado. Lo sabía, lo sentía en todo su ser. En cuanto a Sonia, sólo vivía
para él.»
Fiodor Dostoievski
Crimen y castigo
Crimen y castigo
1 comentario:
muchas gracias por los fragmentos me sirvieron mucho gracias feliz dia.
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