«—Soy el doctor
Lapham, el neurólogo asignado a su padre.
—Gracias. Muchas gracias.
—¿Está usted familiarizado con el cerebro?
—No, no lo estoy.
—Bueno…, el cerebro es como nuestro centro de mando. ¿Ha visto la película Juegos de guerra?
—Ah… no, no la he
visto.
—¿La caza del Octubre Rojo?
—No.
—¿La guerra de las galaxias?
—Sí que he visto La guerra de las galaxias —dije, feliz de poder ayudar.
—Me encantó esa
película —dijo la enfermera gorda—. Me encantó que siempre quisieras que todo
el mundo estuviera bien y que no les matara Darth Vader.
El doctor hizo un
gesto con la mano a la enfermera, pero me miró a mí.
—¿Recuerda cómo Darth
Vader tenía un lugar en la nave espacial que dirigía todo, que estaba
totalmente al mando de todo?
Asentí con la cabeza,
pero sólo recordaba cómo yo sabía que no era realmente él el que hablaba
directamente. No recordaba el resto de las cosas.
—Bien, verá, el lugar
de la nave espacial donde Darth Vader dirigía todo era, para su flota espacial,
lo que la mente de su padre es para el resto de su cuerpo: el corazón, los
pulmones, el estómago, etcétera.
—Vale.
—Bueno, ¿recuerda esa escena al final de La guerra de las galaxias, cuando Luke lanza una bomba de fotones por el vertedero y hay una imagen digital de una señal luminosa corriendo por todas partes hasta que llega a la sala de mando de Vader?
—Y Han Solo le salva
disparando a los guerreros del emperador que estaban escondidos detrás de él —añadió
la enfermera gorda con emoción.
—Sí —dijo el doctor—, a Luke Skywalker le salvó Han Solo, pero ¿qué ocurrió con el centro de mando de Vader?
—¿Saltó… por los aires? —pregunté, bastante seguro de estar en lo cierto.
—Exactamente —dijo el doctor con su voz más profunda. Se pasó sus dedos blancos por el pelo corto—. Exactamente —dijo otra vez.
—Darth Vader escapó al deshacerse del guerrero del emperador. Estaba en las otras películas —informó la enfermera.
—Pero ¿de qué servía la flota sin la sala de mandos?
—Él podía algo así como leer las mentes. Tal vez había…
Pude darme cuenta de
que el doctor se estaba enfadando con la enfermera.
—Lo que quiero decir
es que el puesto de mando es como el cerebro del señor Ide. Una vez que el
fotón explota allí, la situación es muy mala.
—¿Papá no está bien?
—La única sección del cerebro que está mostrando algún tipo de actividad eléctrica es el bulbo raquídeo. El bulbo raquídeo realmente tiene un solo propósito, que es regular la respiración. Es algo muy mecánico, la respiración.
—Pero él está respirando.
—Sí, respira. Pero el centro de mandos ha desaparecido.
—¿Desparecido? —repetí.
—La bomba de fotones —añadió la enfermera mientras me apretaba el brazo.
Papá murió una hora
después. La cama había dejado de inclinarse y ya no estaban la mayoría de
máquinas grandes. Papá estaba muy congestionado y su respiración era una lucha.
Le sostuve la mano y sus párpados se agitaron, y luego dejó de respirar. Le
solté la mano y yo estaba bien, pero entonces dije, tan bajito que apenas pude
oírme a mí mismo: “Adiós, papá”, y lloré. No permití que me vieran llorar.
Esperé hasta que estuve sereno, luego me eché un poco de agua fría en los ojos
y fui al puesto de las enfermeras.»
Ron McLarty
Una historia en bicicleta
—Gracias. Muchas gracias.
—¿Está usted familiarizado con el cerebro?
—No, no lo estoy.
—Bueno…, el cerebro es como nuestro centro de mando. ¿Ha visto la película Juegos de guerra?
—¿La caza del Octubre Rojo?
—¿La guerra de las galaxias?
—Vale.
—Bueno, ¿recuerda esa escena al final de La guerra de las galaxias, cuando Luke lanza una bomba de fotones por el vertedero y hay una imagen digital de una señal luminosa corriendo por todas partes hasta que llega a la sala de mando de Vader?
—Sí —dijo el doctor—, a Luke Skywalker le salvó Han Solo, pero ¿qué ocurrió con el centro de mando de Vader?
—¿Saltó… por los aires? —pregunté, bastante seguro de estar en lo cierto.
—Exactamente —dijo el doctor con su voz más profunda. Se pasó sus dedos blancos por el pelo corto—. Exactamente —dijo otra vez.
—Darth Vader escapó al deshacerse del guerrero del emperador. Estaba en las otras películas —informó la enfermera.
—Pero ¿de qué servía la flota sin la sala de mandos?
—Él podía algo así como leer las mentes. Tal vez había…
—¿Papá no está bien?
—La única sección del cerebro que está mostrando algún tipo de actividad eléctrica es el bulbo raquídeo. El bulbo raquídeo realmente tiene un solo propósito, que es regular la respiración. Es algo muy mecánico, la respiración.
—Pero él está respirando.
—Sí, respira. Pero el centro de mandos ha desaparecido.
—¿Desparecido? —repetí.
—La bomba de fotones —añadió la enfermera mientras me apretaba el brazo.
Una historia en bicicleta
No hay comentarios:
Publicar un comentario